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miércoles, 13 de diciembre de 2017

Chasing Excellence - Capítulo 7 El proceso


CAPITULO 7
EL PROCESO
SOLO AQUELLOS QUE TIENEN LA PACIENCIA PARA HACER LAS COSAS PERFECTAMENTE
ADQUIRIRÁN LAS HABILIDADES PARA REALIZAR DE FORMA FÁCIL LAS COSAS DIFÍCILES.
-      FRIEDRICH SCHILLER

SÁBADO, 23 DE JULIO DE 2016
STUBHUB CENTER, CARSON, CALIFORNIA.

Llevo recorriendo la Villa de los Vendedores por alrededor de una hora, mientras Katrín, Mat y Col asisten a la reunión para recibir instrucciones sobre el siguiente evento. La Villa de los Vendedores es como un bazar de CrossFit, instalada en estacionamiento este del StubHub Center. Parece que todas las empresas que fabrican algo relacionado con el CrossFit están aquí, vendiendo sus artículos. Prácticamente puedes encontrar lo que quieras en la Villa de los Vendedores, desde elementos funcionales como – ropa, aparatos de gym, mochilas, sombreros, suplementos; hasta cosas menos funcionales como – ropa táctica, barras de juguete para niños, anillos de boda de silicón. Todo lo que yo estoy buscando es una bebida de recuperación KillCliff, pero estoy algo desorientado debido al gran número de tiendas y personas. Debido a que las competencias individuales serán en unas horas más, claramente esté es el lugar adecuado para estar ahora – parece que los diez mil espectadores están aquí deleitándose con el festival fitness que son los CrossFit Games.

De regreso en el complejo del StubHub Center, mis atletas están reunidos en el área de calentamiento, como alumnos de secundaria antes de clases. Mat, que tiene una licenciatura en ingeniería de la Universidad de Vermont, les está impartiendo una lección de física a Katrín y a Cole antes de iniciar el siguiente evento, el Climbing Snail. Ya que es la primera vez que los atletas empujarán los caracoles rellenos de paja de heno los cuáles están en el piso de competencia, mucha de la preparación para este evento es teórica. Cuando me encuentro con ellos, Mat, luce como un profesor, está dibujando un círculo con sus manos. Y nos explica que la fuerza debe ejercerse justo en el punto medio del círculo. “Cuando estén empujando el círculo, toda la fuerza debe ponerse en el punto medio. Deben pensar que lo están conduciendo hacia adelante; no lo carguen, ni lo presionen hacia abajo”. Esperemos que tenga la razón.

EVENTO 8:
CLIMBING SNAIL
3 rounds:
·         500 metros de correr por la cancha
·         2 Rope Climbs
·         40’ Snail Push
·         2 Rope Climns

El evento con objetos raros siempre genera mucha creatividad en el área de calentamiento. Obviamente, no hay caracoles por aquí, así que todos los entrenadores y los atletas improvisan con el equipo que tienen disponible, intentan ensamblar cosas para imitar a los caracoles, y lo logran con diferentes grados de éxito. Yo coloqué un montón de peso sobre una caja para saltar y pedí a Katrín que la empujará, mientras que Mat y Cole empujan una máquina de abdominales GHD con O’Keefe encima.

Las mujeres irán primero, y el Control de Atletas las empieza a citar a través del auto-parlante al área de bambalinas. Mientras Katrín se acerca trotando yo le doy algunos gritos de ánimo. Ahora está en una situación completamente positiva a diferencia del evento de escalada de cuerdas del año pasado.  Puedo decir que esta tensa, pero también está llena de confianza – de hecho puedo ver la confianza en sus ojos. A diferencia del año pasado, no tengo que darle ningún discurso para redefinir sus expectativas, aumentar su confianza o reiterar la excelencia competitiva que posee. Ella ya lo ha internalizado – ella sabe exactamente de lo que es capaz y sabe exactamente lo que necesita hacer.

O’Keefe y yo realizamos nuestra caminata 157 del área de calentamiento hasta las tribunas del StubHub para ocupar nuestros asientos en el infernal estadio de soccer. Hace más calor que ayer; estábamos a 82° durante el Murph, pero ahora estamos a 97°. Está tan caliente que las personas de utilería tienen que colocar mantas sobre los Snails entre heat y heat, para que la cubierta no queme las manos de los atletas. O’Keefe, quién es un incurable irlandés, se están poniendo igual de rojo que los Snails que se encuentran en el campo.

El heat de Katrín baja las escaleras, y la vemos realizar una de sus mejores participaciones y mejor desempeño en los CrossFit Games. Kat también lo sabe – ella corre a través de línea de meta con ambas manos en el aire y durante los siguientes cinco minutos es incapaz de dejar de sonreír. Después del evento la encuentro en la parte de atrás del área de calentamiento, tan radiante como si se hubiera comido un reflector. Me dice, “estoy tan feliz como nunca lo había estado”. Lo dice de forma casual, casi sin pensarlo, pero el comentario dice muchísimo sobre su mentalidad. Aquí está una mujer que ha ganado los CrossFit Games – el máximo logro en nuestro deporte – diciéndome que quedar en sexto lugar en el evento de hace un rato le ha provocado el momento más feliz de su vida. ¿Porqué? Ella no ganó el evento. Ni siquiera quedó entre las mejores posiciones; después de ocho eventos, ella  aún continua en tercer lugar. Así que ¿por qué está tan tremendamente feliz?

Porque Katrín, más que nadie qué yo haya entrenado antes, está completamente comprometida con el proceso. “El proceso” es un término que fue popularizado por el entrenador de futbol de la Universidad de Alabama Nick Saban. Por supuesto, Alabama, representa el estándar dorado del futbol colegial – The Crimson Tide ha ganado cuatro de los últimos seis campeonatos nacionales, un estándar de éxito que no tiene paralelo en la era moderna. Saban no se enfoca en lo que otros entrenadores, o al menos no en la forma en lo que ellos lo hacen. Él enseña el proceso:

“No piensen en ganar el campeonato SEC. No piensen en ganar el campeonato nacional. Piensen en lo que necesitan hacer en este ejercicio, en esta jugada, en este momento. Ese es el proceso: pensar en lo que podemos hacer hoy, únicamente pensar en la tarea que tenemos enfrente.”

El proceso es concentrarse en los pasos que nos llevarán al éxito en vez de preocuparnos por el resultado. Es un principio que las personas exitosas tienen en común, y es el corazón de lo que enseño a mis atletas. Por ejemplo, Katrín y yo nunca hablamos de ganar los CrossFit Games. En vez de eso, nos concentramos en establecer las ideas, los hábitos y las prioridades correctas con la confianza de que ello nos conducirá al éxito. Así como Bob Knight, famoso entrenador de basquetbol, acostumbraba a decirle a su equipo, “haz lo que tienes que hacer, tan bien como se pueda. Después hazlo de esa manera todo el tiempo”.

En su corazón, el proceso es el simple énfasis en la preparación sobre todo lo demás. En la práctica, esto es muy mundano – el proceso podría ser muchas cosas, pero glamoroso no es una de ellas.

El movimiento fundamental en nuestro deporte es llamado air squat. No requiere peso, ni barra; simplemente haces una sentadilla hasta que tus rodillas rompan el paralelo y luego te vuelves a levantar. No es un movimiento en el que ningún atleta de los Games piense dos veces. Cuando empecé a entrenar con Katrín, era una atleta que ya había estado en los Games dos veces, aun así trabajamos en su air squat alrededor de un mes y medio. De adolescente Kat fue gimnasta, así que tiene una espina dorsal muy flexible por lo que es propensa a híper extender su espalda en forma de arco. Cuando ella hace eso pierde estabilidad en su core; básicamente su abdomen deja de trabajar. Así que perfeccionar su air squat se convirtió en nuestra prioridad. Durante las primeras seis semanas que llevábamos trabajando juntos, practicamos, criticamos, desarrollamos y refinamos repetida e incansablemente el movimiento menos sexy de nuestro deporte.

El año pasado, después de que ganó los Games, lo hicimos nuevamente. Durante la competencia, noté varios aspectos en sus movimientos que podrían ser mejorados. Ella era excelente, por supuesto – después de todo, ella ganó – pero no era perfecta. El primer día que regresamos al gym, tuvimos una conversación, y le dije que la estaríamos reconstruyendo paso a paso, aunque fuera aburrido.

Iniciamos con el muscle up, un movimiento avanzado pero fundamental en nuestro deporte. Los muscle ups son un gran logro en la vida de un CrossFitter normal; para lograr tu primer muscle up debes trabajar durante meses o años, y nunca olvidarás cuando lo logras ejecutar por primera vez en los anillos. Para los atletas élite, es un movimiento que debe ser dominado, porque cuando compites al máximo nivel, es de esperarse que tengas que realizar docenas de ellos durante la competencia. En ese momento, Katrín podría realizar una abrumadora cantidad de 6 seguidos. En vez de presionarla constantemente a llegar a sus límites mediante entrenamientos intensos y continuos lo cual suena emocionante, le pedí que dejara de hacerlos durante noventa días. Iniciamos su nuevo programa mediante la repetición constante de los movimientos iniciales, es decir, el kipping. Sin jalar, sin levantarse sobre los aros, sin descender – sólo kipping con los brazos rectos, una y otra vez. Después de tres meses de esto, le pedí que agregara la siguiente parte del movimiento: jalar hacia arriba de los aros. Lo hicimos durante un mes. Y continuamos así, con incrementos mensuales, hasta hacer un muscle up perfecto al día durante treinta días. Después incrementamos a dos, y luego a tres. La hacía tomar grandes descansos entre rondas, y nunca programe los mucle ups dentro de las rutinas de los entrenamientos. Pasaron seis meses antes de que los incluyera en las rutinas, y cuando lo hice, ella solo podía hacer uno a la vez – no seguidos. Debía ejecutar cada uno de forma perfecta. Si no salían como los queríamos, deteníamos el entrenamiento hasta que salieran como queríamos.

Eso es el proceso – conocer muy bien en donde te encuentras ahora, e identificar donde quieres estar, después descomponer ese camino en partes. La excelencia es cuestión de pasos o etapas. Perfeccionar un paso, luego otro, y luego otro.

El proceso es simple, pero no es fácil. La mayoría de las personas no tienen los rasgos de carácter necesarios para comprometerse completamente con ello. Para tener este nivel de dedicación, para activar el proceso y vivirlo, debes tener los rasgos de carácter correctos. Eso es por lo que, cuando entreno a mis atletas, primeramente desarrollo la parte humana – tengo que construir personas con altos niveles de resiliencia, paciencia, dedicación, humildad y deseos de mejorar. Una vez que esas características están desarrolladas, podemos continuar con el proceso. Cuando el carácter y el proceso se han realizado, los resultados llegarán por si solos.

Si el carácter no ha sido desarrollado, tendrá mucho impacto en el área de la nutrición y por lo tanto en el proceso. Incluso en los atletas del más alto nivel, siempre hay atletas que no se alimentan como deberían. Culpan a la genética, o dicen, “solo dejare que mi cuerpo tome forma – comeré bien y entrenaré duro”. Ya sea que no lo sepan o que solo quieran evitarlo, pero el tener una buena nutrición hará una gran diferencia en sus habilidades para desempeñar sus tareas. Los primeros dos años de Katrín en los Games son la prueba. Ella tenía la idea de “come sano y entrena duro”, y nunca se involucró en los detalles de llevar una dieta de campeón. Ella era atlética y tenía buena condición física, pero no tenía el físico de una campeona élite, y no lucía para nada como luce ahora.

En los deportes tienes que estar completamente listo para cualquier tarea, y el peso del cuerpo  estará involucrado, cada onza en tu cuerpo hará la diferencia. Es como si no estuvieras trabajando con tu cuerpo, sino con una máquina – sin prejuicios, sin deseos, sin tentaciones, sólo le pones combustible y la pones a trabajar. ¿Cómo alimentarías esa máquina? ¿Cómo la entrenarías? ¿Cómo organizarías sus descansos? Ese es el principio que utilizo con mis atletas. ¿Cómo obtengo cada gramo de eficiencia y capacidad de trabajo de las máquinas que son sus cuerpos?

Hoy en día, la nutrición de Katrín está en el nivel más elevado. Ella pesa y mide cada macronutriente que ingresa a su cuerpo. Las “comidas chatarras” están limitadas a dos o tres por año (y no son, lo que tú o yo consideraríamos como chatarra exactamente). Está tan comprometida con el proceso que ella lleva su propia comida en Tupperware a los restaurantes que visita cuando sale con sus amigos. ¿Es su rígida rutina de alimentación la responsable de su éxito? Por si misma, no. Es una de varias pequeñas áreas que al combinarse conforman un todo bastante poderoso.

En administración, esto es conocido como “suma de ganancias marginales”. En un artículo reciente, James Clear describe como Dave Brailsford utiliza este concepto para revivir al decadente equipo profesional de ciclismo de Gran Bretaña. Como el nuevo director del equipo británico de ciclismo Team Sky, Brailsford se dedicó a mejorar todo lo relacionado con el equipo al 1%, previendo que al combinar esas pequeñas mejoras podría lograrse una mejora significativa.



Él inicio por optimizar lo obvio: la nutrición de los ciclistas, su programa semanal de entrenamiento, la ergonomía de la bicicleta y el peso de las llantas. Pero Brailsford y su equipo no se detuvieron ahí. Empezaron a buscar el 1% de mejora en áreas tan pequeñas que fueron subestimadas por todos los demás – descubriendo cosas como llevar a sus hoteles la almohada que les permitía dormir mejor, hicieron pruebas para determinar cuál era el masaje con gel más efectivo, y enseñaron a los ciclistas la mejor forma de lavar sus manos para evitar infecciones. Buscaban la mejora del 1% por todas partes.

Brailsford creía que si ejecutaban está estrategia de forma exitosa, el Team Sky podría estar en posición de ganar el Tour de Francia en un tiempo de 5 años.

Se equivocó – lo ganaron en tres años. Y lo ganaron otra vez al año siguiente. Actualmente, el Team Sky ha ganado cuatro de los últimos 5 eventos del Tour de Francia.

Mira la gráfica anterior nuevamente. Las mejoras más significativas se llevan a cabo cuando el 1% empieza a ser la diferencia. Día a día, mejoras pequeñas no hacen la diferencia. En la gráfica, son indistinguibles de los pequeños descrecimientos. No es, sino hasta después del año tres que una diferencia empieza a surgir. Pero a partir de ahí, las diferencias empiezan a notarse a un ritmo cada vez más rápido. Alrededor del año diez, las pequeñas mejoras diarias se han sumado; la línea azul está por arriba de donde inicio, y  muy por encima de la línea roja que representa los pequeños decrecimientos.

Esto es de lo que se trata el proceso – de hábitos. Somos la suma de lo que hacemos repetidamente; estamos compuestos de los pequeños detalles que hacemos a lo largo del día. Katrín no gana porque sea una inhumana o un caso genético raro. Ella es una persona talentosa que se ha consagrado a los más pequeños hábitos, día tras día. La gente que es la primera en llegar y la última en irse, la que se compromete a cada momento con la búsqueda de la excelencia, es la que termina en el pódium.

Ray Allen es uno de los mejores jugadores de la NBA quién ha ganado dos campeonatos, uno con los Celtics de Boston y otro con el Miami Heat. En un fantástico artículo, “carta a mi yo más joven”, él se escribe a él mismo cuando tenía 13 años. En la carta, él dice:

Realizarás más de 26,000 tiros en tu carrera. No encestarás 6 de cada 10. Este juego es un hijo de puta. Pero no te preocupes. Un hombre exitoso está construido por 1,000 fracasos. O en tu caso, por 14,000 fallas. Ganarás un campeonato en Boston. Ganarás otro en Miami. Las personalidades de esos equipos serán diferentes, pero ambos equipos tienen algo en común: hábitos. Viejos y aburridos hábitos. Sé que quieres que te revele el gran secreto para triunfar en la NBA. El secreto es que no hay secreto. Sólo se trata de los viejos y aburridos hábitos.

En cada vestidor en que estarás, todos dirán siempre lo correcto. Todos dirán que están dispuestos a sacrificar lo que sea necesario para obtener el título. Pero este juego no es una película. No se trata de ser el héroe en el cuarto cuarto. No se trata de hablar. Se trata de ganártelo a través de tu esfuerzo diario, cuando nadie más está mirando. Kevin Garnett, Paul Pierce, LeBron James, Dwyane Wade. Los hombres con los que ganarás los campeonatos son personas muy diferentes. Lo que los hace campeones son los mismos viejos y aburrido hábitos que nadie ve. Ellos compiten para saber quién puede ser el primero en llegar al gym y el último en dejarlo.

Yo inicie a trabajar con Katrín después de la temporada 2014, cuando no pudo calificar a los CrossFit Games. Cuando inicio la temporada 2015, ella solo tenía una meta: regresar a los Games. Estaba dispuesta hacer todo lo necesario para que eso ocurriera, así que se comprometió completamente con el proceso. Dejó a su familia en Islandia y cruzo el océano para entrenar conmigo en Boston con cero distracciones y concentración total. Maximizó su nutrición y no dejo una piedra sin mover. Priorizó sus horas de sueño y de recuperación todos los días. Calentaba cada mañana con el cuidado y la atención que la mayoría de la gente reserva para el día del juego. Cuando entrenaba, se esforzaba en dar su mejor actuación en cada tarea que tenía enfrente, fuera lo que fuera. Se dedicó de tal manera al proceso que algo extraordinario ocurrió. No sólo regreso a los Games – sino que los ganó.

Hablando del segundo lugar de los Games en 2014 y 2015, Mat elevó su dedicación con el proceso. Después de ganar los Regionales del Este en 2016 con el dominio más grande en la historia de nuestro deporte, alguien le pregunto ¿cuál había sido la diferencia? El contesto, “deje de viajar lo más que pude durante la temporada, me quedaba en casa, quería mantener mi rutina para maximizar el potencial de cada día. No quería salir de mi ambiente. No quería cambiar mis rutinas de descanso más de tres días a la vez, o cambiar mi dieta por más de dos días. Quería quedarme donde mi sintiera cómodo, donde sabía que podía realizar mi rutina de entrenamiento”.

Mat y Katrín han develado el secreto: no hay secreto. El proceso se trata sobre hacer tu trabajo esforzándote al máximo de tus capacidades, así que Katrín y Mat tienen esto tan arraigado en su ser, que se ha convertido en su principal arma. ¿Querían ganar los CrossFit Games? Absolutamente. Pero no hablábamos de ello, y ciertamente no lo convertimos en nuestra meta. Porque para tener éxito es más importante establecer una meta más valiente y ambiciosa, desarrollar un sistema – o mejor dicho un proceso – para llegar ahí.

Bill Belichick, entrenador de los Patriotas de Nueva Inglaterra, vive esto mejor que nadie. En las conferencias de prensa, frecuentemente frustraba a los reporteros dando deliberadamente monótonas respuestas relacionadas al proceso. Al inicio de la temporada 2016 alguien le pregunto si la meta era ganar otra vez el Súper Bowl, a lo que él contesto:

Eso está muy lejos. La meta por ahora es integrar un buen y competitivo equipo. Después la meta podría ser tener un equipo para competir y trabajar en la forma que se requiere para tener una buena primavera, después hacer una buena pretemporada, para después estar listos para el inicio de la temporada. Ya que sólo podemos tener control en las actividades a corto plazo.

Hay mucha más literatura sobre el establecimiento de metas. Hemos dicho que las personas exitosas son aquellas que se establecen metas de forma entusiasta. También hemos escuchado sobre la importancia de que esas metas sean inteligentes – deben ser específicas, medibles, alcanzables, relevantes, y con una fecha específica. Así que si eso es cierto, la persona con las mejores metas ganaría los CrossFit Games.

En realidad, es lo opuesto. La gente tiende a concentrarse demasiado en los resultados, y olvidan que las cosas que se realizan día a día son las que los llevarán ahí. ¿En qué tienes que esforzarte para alcanzar tu meta? Las metas no son más que el resultado de aquello en lo que te esfuerzas.

Ese esfuerzo, ese compromiso con el proceso, es la razón por la que Katrín está frente a mí en el área de calentamiento, reviviendo emocionadamente el Climbing Snail como si no la hubiéramos visto cuando lo hizo. Está hablando tan rápido que casi no puedo seguirla. Ella dice sonriendo, “vi la oportunidad en la último escalada, apenas me podía sostener de la cuerda, así que cuando toque la punta, dije ¡Yes!”. Yo sonreí y le dije, “es la mejor competencia en la que te he visto en los CrossFit Games”.

Algunas de las otras mujeres regresaban del estadio de soccer, y Katrín estaba chocando las manos y dando abrazos a sus amigas. Me dirigí a O’Keefe. Discretamente, para no atraer la mala suerte, le confié lo que me decía mi instinto. “Katrín va a ganar otra vez”.




   

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