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martes, 5 de diciembre de 2017

Chasing Excellence - Capítulo 3 Positividad


CAPITULO 3
POSITIVIDAD
No es lo que ves lo que importa, es lo que miras.
-      HENRY DAVID THOREAU

MIÉRCOLES, 21 DE JULIO DE 2016
REDONDO BEACH, CALIFORNIA.

De regreso en Los Angeles, el día dos de competencia inicia despejado y fresco. El miércoles históricamente es un día de descanso durante los CrossFit Games, pero este año no es así – la playa será lo primero a que se enfrenten los atletas este mañana.

EVENTO 4:
Nadar en el océano
500 metros de nado contra reloj.

Mientras Katrín, O’Keefe y yo desayunamos, el lobby se llena de murmullos sobre el rigor de la competencia del día de ayer y del itinerario de viaje. El vuelo de regreso de Aromas se retrasó durante tres horas, ocasionando que los atletas no pudieran llegar a su cama hasta después de la media noche. Esta mañana se despertaron nuevamente antes de las 5:30 para prepararse para el evento de natación. Tres eventos, dos vuelos, horas de retraso, sin dormir, y competir otra vez. Estoy emocionado. Los Games no podrían haber tenido un mejor inicio.

No todos los competidores comparten mi entusiasmo. Varios de ellos discuten abiertamente la forma de boicotear el evento de natación de hoy. Una de las competidoras dice, “si ninguno de nosotros se presenta, no lo podrán realizar”, y yo no puedo saber si lo dice en broma o en serio.

Ya en la playa, las quejas continúan. La persona que documenta los Games llamado Sevan Matossian le pregunta a una de las mujeres, veterana de tres años, como se siente después de un día bastante rudo en el Rancho. Su respuesta fue incluida en el detrás de cámaras del documental de los CrossFit Games 2016:

Esperar en el aeropuerto hasta muy tarde en la noche, después tener que levantarte muy temprano, fue realmente agotador. Está siendo mucho más difícil que los dos años anteriores. El primer día – desde levantarte temprano y luego tres eventos en un día – eso fue más duro de lo que hicimos en 2014, cuando lo único que hicimos el primer día fue nadar en el océano y después over head squats. Me sentía mejor para enfrentar el jueves. Y ahora, estamos nadando en miércoles, así que no tuvimos día de descanso.

Unos minutos después, Sevan encuentra a Katrín, quien estaba saliendo del área de calentamiento entre las olas. Le realiza la misma pregunta. Y aquí esta lo que ella dijo:

Me siento bien. Fui capaz de dormir mucho ayer. Dormí en el piso del aeropuerto, dormí durante el vuelo de regreso, después dormí durante 5 horas cuando regrese a la cama. Me siento realmente bien. Estoy feliz por ello. Amo lo que vamos hacer sin haber tenido día de descanso, lo amo. Mientras más volumen, mejor. Eso es grandioso. Hasta ahora ha sido increíble.


Escuchando ambas entrevistas, podrías pensar que ambas mujeres están describiendo dos competencias diferentes. Pero no fue así. Ellas tuvieron exactamente el mismo día ayer. Hicieron las mismas rutinas, se enfrentaron a los mismos problemas de viaje, y tuvieron la misma cantidad de sueño. La única diferencia es como eligieron percibirlo; mientras que una mujer ve adversidad y dificultad; Katrín ve ventaja y oportunidad.

Katrín hace sonar dormir en el piso del aeropuerto como un día en el spa. Su optimismo suena tan convincente que parece hacerte olvidar que estar tirado en el suelo de un lugar público ruidoso es incómodo y terriblemente desfavorable para dormir y recuperarte. Si tú eres un atleta profesional tratando de defender tu título de campeón, definitivamente no es lo ideal. Lo mismo puede decirse de las horas de sueño durante el vuelo; cualquiera que ha intentado dormir durante algún vuelo sabe lo regenerador que puede ser. Katrín, sin embargo, elige ver el lado positivo. En su mente, algo de sueño es mejor que no dormir.

Mantenerse positivo es difícil para los humanos debido a que nuestro ADN esta cableado para retener más fácilmente las experiencias negativas que las positivas, con la finalidad de buscar la sobrevivencia. Si nos remontamos a la época cuando nuestra especie se encontraba en modo de sobrevivencia, era mucho más importante saber y recordar que el enorme animal peludo con garras y colmillos podría matarte que saber y recordar que la mariposa era bonita. Era más importante recordar cuales moras podrían matarte que aquellas que eran sabrosas. Desarrollamos un instinto de sobrevivencia que está muy arraigado en una mentalidad negativa.

Pero la negatividad es tremendamente perjudicial para el desempeño. Cuando te encuentras en una mentalidad negativa, te vuelves más lento y menos preciso. La positividad, por contraste, está directamente relacionado a un mejor desempeño. No importa de qué tarea o profesión se trate; puedes ser un atleta, un cirujano, un mecanógrafo profesional, o un violinista clásico. Si te mantienes positivo, te desempeñarás con más velocidad y precisión. Serás mejor en todos los ámbitos. Debido a esto, necesito a mis atletas en una mentalidad positiva con la finalidad de obtener el máximo esfuerzo de ellos el cual maximice su potencial. En mi gym, hay una triple política obligatoria:

NUNCA LLORIQUEAR, NUNCA QUEJARSE, NUNCA DAR EXCUSAS.

Es más fácil decirlo que hacerlo. No solo es la negatividad arraigada en nuestro ADN; la negatividad también está completamente arraigada nuestra cultura; casi dos terceras partes de las palabras en inglés denotan el lado negativo de las cosas. Mientras que la positividad, es un comportamiento que debe ser aprendido. Algunas personas son privilegiadas por crecer con una perspectiva optimista de la vida; pero para la mayoría, es una actitud que pueden elegir conscientemente. Katrín es una persona muy optimista, pero eso no significa que no tenga que esforzarse, y que no continúe esforzándose todos los días. Lo cual se traduce en que el optimismo sin esfuerzo mostrado en su entrevista en la playa es algo en lo que hemos trabajado durante años.

Por ejemplo, el último invierno, le pedí a Katrín que hiciera un largo calentamiento afuera. Era febrero en Boston, hacía frío. Cuando regreso al gym, salía vapor de sus hombros, soplaba fuerte, y usaba sus manos para darse un poco de calor. Le pregunte como había estado el calentamiento. Ella me dijo sus tiempos por cada sección, me dijo sus pensamientos en cuanto a la dificultad del calentamiento y su opinión general. Después, ella dijo, “ y estuvo… uh, ya no importa”.

Estuvo a punto de decir, “estuvo realmente frío”, pero está condicionada a no quejarse al punto donde algo como eso – al igual que otras tantas cosas, como es un simple indicador del clima – físicamente no puede salir de su boca. Decir que hace frío afuera podría parecer una simple declaración de un hecho, pero a estas alturas, a corto plazo, es más dañino de lo que parecería. Concentrarte en sentimientos negativos o circunstancias como – hace calor. Estoy cansado. El tráfico apesta. Mi jefe es un idiota – provoca concentrarnos cada vez más en cosas que están completamente fuera de nuestro control y son potencialmente dañinas para nuestro desempeño. Fuera del ambiente competitivo o en algún escenario de la vida concentrarse en factores negativos incontrolables no mejorará tu desempeño o tus niveles de estrés.

Una mentalidad positiva es una característica indiscutible de las personas que se desempeñan a un nivel élite debido a que la mente humana se concentra y habla sobre lo que ve más. El profesor de Stanford Arnold Zwicky llama a este efecto “ilusión frecuente”, lo cual es esencialmente un fenómeno que causa que veas más de las cosas en las que estás concentrado. Él dice que esto es provocado, por dos procesos psicológicos.

El primer proceso, atención selectiva, inicia cuando estas impresionado por una nueva palabra, cosa, o idea; después de eso, mantienes un ojo en ello de manera inconsciente, y como resultado tu encontrarás más continua y sorprendentemente, más de ello. El segundo proceso, confirmación parcial, te alienta a que cada nueva pista y es una prueba más de que tu impresión sobre esa cosa ha ganado omnipresencia de la noche a la mañana. Piensa sobre la última vez que compraste un auto nuevo.  Vamos a decir que fue un Jeep Grand Cherokee. Después que lo compras, lo empiezas a ver por todos lados – pareciera que una de cada tres personas en el camino conduce un Jeep Grand Cherokee. Y no solo notas los colores – también notas los diferentes modelos y los accesorios; los Laredos son más comunes que los Limitados, y solo hay menos SRTs que Overlands. Obviamente, no ha habido un incremento repentino en las ventas locales de Jeep el día que tu compraste le auto. Pero como has estado pensando activamente en ello, no puedes evitar notarlos en todos lados. El mismo principio aplica en tu mentalidad hacia el deporte, trabajo y relaciones. Si hablas sobre (o peor aún, te quejas) cosas que están fuera de tu control, esas cosas van a disminuir tu desempeño, verás y experimentarás más de esas cosas.

De regreso a Redondo Beach, Katrín está haciendo algo de lo que hemos hablado y practicado cientos de veces: se está contando a sí misma la historia correcta. Todos nos decimos historias a nosotros mismos, y aunque las realicemos o no, esas historias dictan de lo que somos capaces. Ryan Holiday escribe en “The Obstacle is the Way”, “no hay nada bueno o malo con nosotros, solo es percepción. Es el evento por sí mismo y la historia que nos decimos a nosotros mismos lo que importa.”  Si la historia te está diciendo que no eres lo suficientemente bueno, lo suficientemente inteligente, muy viejo, muy joven, o que no puedes hacerlo, tu subconsciente te creerá.

La dieta es un área donde se muestra esto comúnmente. La gente se dice así mismos toda clase de historias negativas respecto a su incapacidad de bajar de peso. Realizan una dieta saludable y van al gym con muchas ganas durante algunas semanas, y después se decepcionan cuando el progreso es lento. Dicen, “tengo huesos grandes”, o culpan a su genética y su metabolismo lento antes de regresar a la comida chatarra y dejar de entrenar. Somos culpables de alguna forma u otra. Para mí, es la tecnología. Nunca he sido un conocedor de la tecnología – soy el chico que no ha actualizado su teléfono hasta que el Iphone 3 que estuve utilizando por media década que descontinuado. Tengo 40 años, pero cuando se trata de tecnología parece que tengo 105. Si es más complicado que cambiar las baterías, le pido ayuda a mi esposa. Si tengo que hacer algo más que cambiar el tipo de fuente en mi presentación de PowerPoint, llamó al director de publicidad de mi gym. Me digo a mí mismo que no soy bueno entendiendo la tecnología, así que se convierte en una profecía auto cumplida – porque odio la tecnología, la evito meticulosamente, lo cual asegura que permanezca incompetente usándola, lo cual me hace odiarla aún más.

El lado opuesto es igualmente poderoso. Se te dices a ti mismo, como Katrín, que no importa la cantidad de adversidad que tengas que enfrentar, tendrás que ser resiliente y así triunfar a largo plazo. Tus pensamientos se convierten en tus palabras, tus palabras se convierten en tus acciones, y tus acciones determinan tu destino. De regreso en la playa, la natación aún no empieza, pero la mentalidad de Katrín ya empieza a darle ventaja competitiva – en su mente, ella está fresca y descansada, mientras que la mitad de los competidores se están diciendo a sí mismos, que casi no han dormido y no se sienten en su mejor forma.

O’Keefe y yo miramos desde una torre de salvavidas cercana mientras los atletas se acercan a la línea de salida. Cuando Dave suena la chicharra, 80 cuerpos se abalanzan como si solo fueran uno. Están completamente desbocados después de sólo unos segundos, es como una estampida a través de la arena, seguida por una pelea callejera en el agua. Los hombres y mujeres están compitiendo juntos en un solo heat, lo cual incrementa la sensación general de anarquía. Es imposible decirle a los atletas que respeten el espacio de los otros – están usando los mismos trajes y gorra de natación diseñados para los Games – así que no podemos hacer nada más que esperar a que Kat, Mat y Cole emerjan de las olas.

Katrín, quien se ha estado esforzando mucho para convertirse en una nadadora promedio, finalmente emerge después de ocho minutos. Ella corre lo más rápido que puede con sus piernas temblorosas y queda en onceavo lugar, una muy buena posición.  Veo como desde uno de los lados llega Cole y la sujeta de un pie. Ella se tarda alrededor de un minuto en recuperar la respiración, y después los dos se empiezan a reír y a gesticular animadamente. Obviamente, Katrín debe su desempeño a algo más que su mentalidad de vaso medio lleno. Ella entrenó en la alberca alrededor de un año, y pasamos el último mes Cape Cod nadando en el océano. Al final del día, fue su preparación, y no su actitud, la que determino los resultados. La positividad no garantiza nada, pero puede aminorar el esfuerzo percibido, lo cual vuelve las cosas más disfrutables, ya que mejora tus oportunidades de competir al máximo de tu potencial y te da una ventaja competitiva.



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