CAPITULO 12
CLUTCH
EN
CUALQUIER DEPORTE REALIZADO CON EL CUERPO,
LA
CABEZA ES LA QUE CUENTA.
- JAMES KERR
DOMINGO, 24 DE JULIO DE 2016
STUBHUB
CENTER, CARSON, CALIFORNIA.
Después de 5
agotadores días, llega la tarde del domingo a Carson. La semana para la que
hemos entrenado casi un año, está terminando casi tan rápido como empezó. Así
ocurre todos los años – todos van a los CrossFit Games con una mentalidad
endemoniada, preparados mentalmente para soportar la semana más retadora de sus
vidas. Termina siendo lo opuesto: tienes un par de eventos, y después el día
uno se ha terminado. Llega el segundo día, el cual normalmente solo incluye un
evento, y el día se terminó. Después inesperadamente llega el fin de semana.
Después del viernes, ya solo te quedan dos días en los CrossFit Games. Lo
siguiente es el sábado por la noche. La semana se pasa tan rápido que se siente
como un viaje en el tiempo.
En la medida
de lo posible, trato de preparar a mis atletas sobre cómo pasará el tiempo tan
rápido durante la competencia. Les digo que se pasará muy rápido, con la
esperanza de que se tomen el tiempo para apreciar los momentos a lo largo de la
competencia. Como cuando un padre manda a sus hijos a la escuela, les suplico
que aprecien y recuerden cada momento. Eso no hará que la competencia
transcurra más lenta, pero la disfrutarán más.
Katrín, Mat
y Cole sólo tienen una oportunidad más para hacerlo. El evento final de los
CrossFit Games 2016 es llamado “Redemption”.
EVENTO 15
REDEMPTION
3 Pegboard
Ascents
21 Thrusters
(men 135 lb/ mujeres 85 lb)
2 Pegboard
Ascents
15 Thrusters
(men 135 lb/ mujeres 85 lb)
1 Pegboard
Ascents
9 Thrusters
(men 135 lb/ mujeres 85 lb)
Todos
esperábamos el regreso del pegboard. El año pasado, cuando el pegboard fue
presentado por primera vez en los CrossFit Games, detuvo a la mayoría de los
atletas, los cuales no lo habían visto antes, mucho menos lo habían intentado
escalar. El pegboard fue una de las dos partes del evento final 2015, durante
el cual, la mayoría de las mujeres tras tener múltiples fracasos optaron por
detenerse y guardar energía para la segunda parte. Fue un momento extraño (y no
muy conveniente para la televisión), ver a las mujeres con mejor condición
física del planeta tiradas en el suelo sin poder hacer nada. Los hombres lo
hicieron un poco mejor, pero aun así se veían fuera de su elemento.
Pero los
CrossFit Games están diseñados para poner a prueba a los atletas, no
exhibirlos. Los Games han expuesto las debilidades de los competidores durante
10 años, llevando a los atletas a nuevos retos físicos y mentales. Después de
los Games 2015, cada atleta regreso a casa y compró un pegboard. Han estado
entrenando en eso durante un año y no serán derrotados por el pegboard otra
vez.
En la Villa
de los Atletas, los competidores calientan para el momento final de los
CrossFit Games 2016. Los hombres se forman alrededor del pegboard en el área de
calentamiento y hacen turnos para escalarlo. Mientras espera, Josh Bridges
bromea fuerte con Mat y le dice, “este chico cree que porque tiene 200 puntos
de ventaja puede caminar por aquí de forma engreída, creo que Ben te ganará.
Josh le pregunta a Ben, quien está recargado en un GHD, cuál es su puntuación.
Ben dice, “como de 600”. Y Josh le contesta riendo, “creo que si puedes
alcanzarlo”.
Los
resultados en el lado de los hombres ya están más que sentenciados, pero en el
lado de las mujeres la competencia está bastante cerrada. Con un evento
restante, Katrín aventaja a Tia Clair Toomey por solo 23 puntos. En cualquier
otro evento, 23 puntos podrían ser una ventaja cómoda, pero en este evento, no
es así. Katrín batalla mucho con el pegboard; escalar un pegboard es tan
difícil para ella, como solían serlo las escaladas de cuerda. Durante el evento
de pegboard del año pasado, no pudo completar un solo asenso. Así que fuimos a
casa y practicamos. Durante el último año, Katrín ha entrenado en el pegboard
incansablemente mientras continuaba incrementando la fuerza de la parte
superior de su cuerpo en general. A pesar de esto, el mayor número de ascensos
que ha podido hacer es, uno.
Así que, con
el título de los CrossFit Games en juego, Katrín se enfrenta ahora con su
debilidad más grande. Es una enorme cantidad de presión – sí Tia termina en el
top tres y Katrín queda fuera del top ten, Tia ganará los CrossFit Games.
Momentos
como este son para los que hemos entrenado durante un año. Es por esto que
pasamos mucho tiempo desarrollando los rasgos de carácter como compromiso, determinación, optimismo y
humildad. Es la razón por la que practicamos abrazarnos de la adversidad y
aprender de ella como ventaja competitiva. Eventos como este son la razón por
la que nos hemos concentrado tanto en el proceso – porque hemos aprendido a
controlar estas cosas y por eso lo haremos.
Katrín y yo
platicamos sobre la estrategia mientras calienta en el pegboard. Todo dependerá
de cuantos asensos pueda realizar en el pegboard, así que se convierten en el
foco de nuestra estrategia. Le digo que “no
hay razón para que se apresure, solo serás tú contra el pegboard, no tú contra las
otras competidoras. Se inteligente. Se madura. No desperdicies esfuerzos.
Mantente en tu burbuja – no te dejes influenciar por las otras mujeres”. Kat
asiente. Ella lo sabe. Le doy un último abrazo antes de que se dirija a
registrarse para el evento, y después nos dirigimos hacia el estadio de tenis
por última vez.
Las mujeres
mejor posicionadas están en la parte alta de las escaleras del estadio mientras
se anuncia el evento final, Redemption. Si Katrín está nerviosa, es imposible
notarlo – cuando su nombre es anunciado, levanta ambas manos sobre su cabeza y
luce una tremenda sonrisa. Las atletas trotan hacían la cancha, recogen sus
pegs, y se colocan frente a la fila de pegboard de Plexiglass. Suena la señal
de inicio para el último evento de los CrossFit Games.
Katrín luce
segura y relajada mientras salta a su pegboard y empieza a treparlo. Hace uno,
luego otro, logrando así su igualar el número total de pegboards logrado en
toda su vida. Se baja del tapete de color rojo y se para en la cancha de tenis,
agitando sus brazos. Tia, quién está en el carril al lado de ella, está
realizando su tercer asenso. Katrín luce despreocupada; espera otros 20
segundos, y salta para buscar su tercer asenso. A mitad del camino, sus bíceps
se vencen. Incapaz de flexionar sus bíceps, se queda colgada de los pegs, con
los brazos completamente extendidos. Me preocupo, pero ella tiene una cabeza
increíble y hace la única cosa que es capaz de hacer – intentar mover un peg a
la vez. Lo hace lentamente, pero lo está logrando. Llega a la cima, y la miro,
con el corazón en mi garganta, mientras empieza a descender. Cuando sus pies
tocan el suelo, me doy cuenta que estaba manteniendo mi respiración.
Katrín
completa su primera ronda de pegboards y se dirige a la barra para ejecutar los
thrusters. Todas las líderes, incluyendo a Tia, están de regreso en los
pegboards. Katrín luce despreocupada por todo lo que pasa a su alrededor, ella
está manejando su barra de forma inteligente. Termina su ronda de 21, mueve su
barra hacia adelante y regresa al pegboard. Se empieza a ver agotada – su
caminata de regreso al pegboard es lenta, se detiene frente a los tapetes y
agita sus brazos nuevamente. Mientras tanto, Tia, se está moviendo arriba y
abajo en el pegboard como un koala; mientras que Katrín inicia su segunda ronda
Tia ya la ha terminado.
Estos son
los momentos en los que es extremadamente difícil mantenerte concentrado en tu
propio esfuerzo. Si Katrín voltea de reojo a ver a Tia y se engancha con la
idea de alcanzarla, si trata de ir más rápido y no toma los descansos
necesarios, o si falla solo uno de los pegboards – habrá terminado.
Pero Katrín
se crece mucho en momentos como este. Toma un largo respiro antes de iniciar su
siguiente asenso, su rostro refleja compostura y concentración. Parada frente a
su tapete, agita sus brazos hacia adelante y hacia atrás, como nadador antes de
entrar a la alberca. Todas a su alrededor están empezando a pagar el costo del
pegboard. Sara Sigmundsdóttir, quien había estado por delante de Katrín durante
todo el evento, repentinamente resbala del pegboard cerca de la punta y tiene
que cruzar toda la cancha por otro par de pegs. Cuando regresa, Katrín aún está
mirando su pegboard.
La multitud
la anima, impulsándola a que suba, pero ella no parece notarlo. Sara inicia
otro intento, pero a mitad del camino falla nuevamente. Finalmente, Katrín
camina sobre el tapete, pone los pegs en los primeros agujeros e inicia su
cuarto asenso. Aún es incapaz de flexionar sus brazos, así que se ve forzada a
subir un agujero a la vez durante todo el ascenso, a pura fuerza de voluntad. Llega al fondo,
agita sus brazos, y después, con solo dos minutos restantes en el evento, salta
para intentar su cuarto asenso. Sus brazos están completamente agotados – no
tiene ya ninguna fuerza de arrastre – pero no se asusta, simplemente va
escalando un agujero a la vez. Yo no tengo idea como ella está haciendo esto –
esto representa cinco veces más asensos que su marca personal – ella completa
de manera exitosa la segunda ronda y regresa a la barra.
Con sólo
noventa segundos restantes en el reloj, Katrín empieza aumentar el ritmo
ligeramente. Ella termina sus thrusters sin bajar la barra y regresa al
pegboard para la ronda final. Mientras tanto, Tia termina el evento y queda en
octavo lugar. Kat está a la mitad del pegboard cuando se termina el tiempo, ya
que había un límite de 10 minutos.
Se han
terminado los CrossFit Games, pero el resultado final aún no está claro. Hubo
tres heats antes que el de Katrín, así que es imposible saber en qué lugar
quedo. ¿Habrá terminado Tia lo suficientemente arriba para ganarle a Katrín?
O’Keefe no lo cree, pero no hay forma de estar seguro. Todo lo que podemos es
esperar mientras se calculan los resultados. Las mujeres se sientan ansiosas
debajo de los pegboards. La gente empieza a murmurar con aprehensión. Pasan
tres minutos, luego cinco, luego siete. Esto parece una eternidad. Miro hacia
abajo a Katrín. No se ha movido en cinco minutos – solo está sentada en el
tapete, mirando hacia el piso. Mis mariposas están volando en forma apretada,
pero mi ansiedad palidece comparada con la de mi esposa, Heather, quien está
haciendo pequeños chillidos, como si se estuviera saliendo aire lentamente de
un globo.
Diez años o
diez minutos después, Dave Castro arriba a la cancha, con el micrófono en la
mano. E inicia, “Señoras y señores su campeona de los Reebok CrossFit Games
2016 es…” hace una pausa dramáticamente dejando que su eco resuene por el
callado estadio. Sus siguientes palabras son como oxígeno. “una vez más…” “Katrín
Davidsdottir”.
No todos
somos un atleta élite. Algunos de nosotros nunca competiremos en los CrossFit
Games, o en un Tour PGA, o tendremos la confianza para realizar el tiro ganador
en un juego de la NBA. Pero eso no significa que seamos inmunes a vivir
situaciones de alta presión. No importa si eres un jugador de tenis recreativo,
un CEO de Fortune 500, un pintor, o un padre, enfrentarás desafíos en momentos
críticos. Cuando eso se presente, ¿cómo los manejaras?
Clutch es un término alrededor del cual se describen desempeños
extraordinarios en situaciones de alta presión. Mucha gente asocia el desempeño
clutch con algún momento de triunfo deportivo: el
home run con el que ganas el juego, el servicio as en un match point, la
canasta en el momento final. Pero cada uno de estos contiene un elemento de
suerte, y clutch no es suerte. Paul
Sullivan, en su libro, Clutch, dice,
“ser clutch no es hacer un hoyo en uno para ganar; es hacer un tiro para dejar
la pelota lo más cercana a la bandera para mantenerse en el juego. Son las
series de jugadas ejecutadas con precisión en el futbol, no el lanzamiento al
ave maría. Es la fortaleza de continuar peleando en la final de Wimbledon como
siempre lo has hecho – aunque el mundo entero este deseando que te rindas”.
Clutch es
simplemente la habilidad de hacer lo que puedes hacer de manera normal bajo una
inmensa presión. Lo que Katrín hizo en el piso de competencia fue algo
extraordinario – no porque haya tenido un desempeño extraordinario salido de la
nada, sino porque fue capaz de dar su máximo esfuerzo absoluto. Cuando la
competencia estaba en su máximo, ella fue capaz de competir exactamente de la
forma en la que entrena en el gym, cuando no hay nada de presión en absoluto. Se
concentró en la tarea, no en el resultado; se adaptó muy bien frente a la
adversidad; controlo su propio desempeño e ignoro el de sus competidoras; y mantuvo su confianza
optimista característica en que si ella hacia todo lo que podía, podía estar
satisfecha.
Es una tarea
extremadamente difícil. Transferir lo que puedes hacer en una atmosfera
relajada a un atmosfera tensa no es fácil; si así fuera todos podrían ser clutch.
Así que,
¿cuál es el secreto? ¿Por qué algunas personas pueden hacerlo y otras no?
Ahora ya
conoces la respuesta: mediante la preparación. Si quieres ser clutch, necesitas
fortalecer tus habilidades y prepararte todos los días para esos momentos de
extrema presión. Si te preparas adecuadamente, a través del entrenamiento,
práctica, y esfuerzo constante, puedes confiar que ese entrenamiento, te
ayudará a obtener lo mejor de ti. Esto incluye el entrenamiento físico, por
supuesto, ya que es tan importante como el entrenamiento mental necesario para
ser grandioso cuando la presión es alta. Los rasgos de carácter requeridos, los
que permiten a mis atletas seguir el proceso, no se desarrollan de la noche a
la mañana. Tanto para Mat como para Katrín, las medallas de oro alrededor de
sus cuellos son la culminación de años de desarrollo personal, y solo cuando se
aproximaron a la maestría en ese desarrollo, empezaron a ver los resultados.
Es una
lección de la cual todos pueden aprender, sin importar que seas un empresario
con una idea para invertir o un golfista recreativo intentando mejorar su
juego: no puedes evocar algo que no tienes. Los rasgos que necesitarás cuando
la cosa se ponga intensa son – determinación, optimismo, concentración,
adaptabilidad, resiliencia – los cuales deben forjarse a través del
entrenamiento. Quien eres en el piso de competencia es un reflejo de quien eres
en los entrenamientos – ni más, ni menos.
Por segundo
año consecutivo, Katrín es la mujer con mejor estado físico del mundo. Al
escuchar su nombre, ella oculta su rostro entre las manos, entre una mezcla de
júbilo y alivio. Cae sobre sus rodillas en la cancha del estadio de tenis y se
llena de emoción. Tia, en un gesto de deportivismo, clase y mucha elegancia, la
abraza y mueve sus hombros.
Dave ayuda a
Kat a levantarse, la lleva al centro de la cancha. Ella levanta ambas manos y
saluda a la multitud, quien reacciona con un aplauso vikingo de victoria.
Inicia lento, después se va incrementando hasta que el ruido es ensordecedor
por todo el estadio. Las banderas islandesas que parecen traen su propio aire
integrado, ondean por todos lados en el estadio. Katrín mira alrededor, nos
ubica a O’Keefe y a mí, y empieza a correr abruptamente. Salta sobre una
bocina, me estiro y le doy un abrazo. Le digo lo orgulloso que estoy de ella, y
cuanto merece este momento. “Recuerda cada minuto de esto, es un momento especial
en tu vida. Haz algunos recuerdos”. Kat me mira felizmente y asiente. Después
ella baja de la bocina y regresa a la cancha, como campeona una vez más.